Copiar enlace

Si eres mujer seguramente sabrás más fácilmente de lo que hablamos: el Pink Tax o impuesto rosa se puede explicar más fácilmente tal como hace AMVO, y es que tan solo debes ir al supermercado o incluso abrir cualquier eCommerce en tu navegador y comparar los precios de artículos idénticos, pero con enfoque de género, para hombres y mujeres.

Qué es el Pink Tax

Los productos enfocados para hombre se presentan generalmente de color azul, mientras los productos enfocados para mujeres, generalmente de color rosa, un ejemplo muy claro son los rastrillos que, a pesar de tener un diseño idéntico y de ser de la misma marca, los productos para mujeres tendrán un costo mayor, sin importar que sean exactamente iguales.

Esta diferencia de precio que puede ser desde centavos a la alza hasta decenas o centenas de pesos más y que son difícilmente justificables a simple vista es a lo que le llamamos Pink Tax, ya que las consumidoras lo seguirán pagando bajo la creencia de que se trata de un producto diseñado especialmente “para ellas”, ya sea que cuidan mejor la piel, que cuentan con fragancias femeninas o cualquier otro significado que el color rosa, femenino por excelencia nos dicte.

Así, el Pink Tax o impuesto rosa en realidad se trata de un sobreprecio que las mujeres pagamos por productos supuestamente diseñados para nosotras, pero que en esencia son exactamente los mismos que aquellos productos enfocados para hombres.

[Tweet “¿Conoces el #PinkTax? Una práctica que los especialistas de marketing deben evitar para mostrar equidad.”]

Y este no es un fenómeno exclusivo en la categoría de belleza en los supermercados, ya que se puede observar fácilmente en una amplia gama de productos que abarca cualquier edad: desde juguetes y artículos para bebé como biberones y pañales, productos de higiene personal, y hasta servicios como pólizas de seguros.

De acuerdo con la Profeco, el Pink Tax se debe a que las marcas invierten más dinero en la presentación de sus productos, empaque, diseño y publicidad, por estar dirigidos a mujeres. Sin embargo, el problema es que parece que este sobreprecio no es fácilmente justificable, al menos no del todo.

El eCommerce ayuda a realizar compras más consientes y evitar el impuesto rosa

A pesar de que se trate de una diferencia de centavos, el impacto durante la vida de una consumidora es considerable para su bolsillo. De acuerdo con el sitio Ax The Pink Tax, iniciativa para combatir el impuesto rosa, el sobreprecio que pagamos las mujeres hace que ser mujer sea más costoso, factor que se suma a la brecha salarial que existe entre hombres y mujeres.

Por supuesto que en eCommerce el Pink Tax también se hace presente, ya que no depende directamente del canal de venta, sino directamente de las marcas y las campañas de marketing detrás de estos productos y servicios. Sin embargo, el eCommerce ofrece la facilidad de comparar precios más rápidamente, lo que facilita una compra más consciente.

Mujeres destacan en compras por eCommerce

Por otro lado, las marcas y los especialistas de marketing deberían enfocarse más en corregir y combatir el Pink Tax, con el fin de brindar una equidad a sus productos y servicios, del mismo modo que se enfocan en ser socialmente responsables. Hay que recordar que las consumidoras y consumidores pueden realizar compras más meditadas en eCommerce y no solo dejarse llevar por las campañas de marketing.

Imagen: Sitio web Ax The Pink Tax

Mantente informado de las noticias más relevantes en nuestro canal de Telegram

Escribir comentario

¡Mantente al día!