Nadie quiere tener una base de correos llena de usuarios inactivos, y sin embargo esto es más común de lo que tú puedes llegar a pensar.
¿Qué son exactamente “los usuarios inactivos”?
Contempla a los usuarios inactivos como todos aquellos que siguen presentes en tu lista de email marketing pero que no te dan ni una apertura ni mucho menos un clic, desde hace algún tiempo.
De entrada, hay que considerar a suscriptor o usuario inactivo a todo aquél que no ha abierto una newsletter tuya en al menos medio año.
[Tweet “Un usuario #email inactivo es aquél que lleva más de 6 meses sin abrir una #newsletter”]
Cuando el número de este tipo de usuarios aumenta, hay que darnos a la tarea de armar una newsletter que tenga como principal intención el activarles.
Esto no es sólo por fines de retorno de inversión; una tasa alta de usuarios inactivos nos llevará a ratios de apertura más pequeños y, consecuentemente, a una base de envíos mucho más pobre, lo cual eventualmente afecta en la reputación email.
Manos a la obra
Si ya entendiste lo que te digo, la tarea es sencilla: tienes que detectar (venga, tenemos si tú lo quieres) quiénes son esos usuarios y hay que identificar el porqué no están realmente enganchándose contigo.
Una vez detectado el grupo de usuarios inactivos, es hora de comenzar a bajar la estrategia sobre correo; es obvio que este punto puede depender bastante del giro de tu marca o empresa.
¿Cómo pasar a la acción sin herirlo u ofenderlo?
En todo caso, las buenas prácticas nos marcan que hay que tocar un poco las fibras emocionales y, si se permite, incluir alguna pequeña “carnada” que haga que el usuario muerda el anzuelo (esto puede ser un descuento por consumo, si se da el caso para tu marca).
Después de un asunto llamativo (el “Hola, ¿Te acuerdas de nosotros?” y sus variantes suelen ser bastante efectivos) viene el cuerpo de la newsletter, en donde la idea es ser muy directo en el afán de reactivar al usuario.
Por último, te recomiendo que consideres incluso prestarte un poco a las decisiones drásticas sin llegar a ser agresivo(a); es decir, deja en claro que este correo es para volver a estar en contacto, al mismo tiempo que le clarificas que puede poner fin a las comunicaciones con tu marca, siendo esto una mejor decisión para ti y para ambos (lo sé, suena un poco dramático pero es la realidad).
Yo te lo repito y te aconsejo, no dejes que tu base de datos pierda su calidad. Existen bastantes formas de convertir lo negativo en positivo, y aún cuando el usuario no quiera reenganchar contigo podrás tomar la decisión (o darle la opción) de tomar caminos separados. Recuerda, lo que más importa a la larga es tu reputación email.
[Tweet “A los usuarios inactivos en una BBDD es mejor no tenerlos a la larga”]
Venga ya, si tienes dudas ya sabes donde encontrarme. Ojalá esto te haya sido de mucho provecho.
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